Reemplazar fusible de microondas

Unos de los utensilios de la cocina que se ha convertido en imprescindible en la mayoría de los hogares, ya que resulta muy práctica para calentar todo tipo de comidas de manera rápida, e incluso para poder cocinar dentro del mismo si se sabe cómo hacerlo, lo que le convierte en una herramienta que duele perder.

El microondas

Este es considerado como uno de los errores más felices de la segunda guerra mundial, ya que fue en ese momento cuando se descubrió el potencial contenido en las microondas, las cuales se encargan de alterar las moléculas que componen la materia, haciendo que éstas liberen energía, la cual es representada en forma de calor.

Es por esta razón que dentro del microondas no se pueden introducir elementos metálicos, ya que sus moléculas reaccionan de manera exagerada a dicha radiación, por lo que generan chispas, cortocircuitos, y suelen dañar el microondas de forma casi inmediata. De hecho, incluso los envoltorios de recubrimiento metálico como el de los doritos es capaz de dañar un microondas.

Un horno microondas puede ser el máximo aliado dentro de la cocina diaria, ya que el procedimiento para poder comer caliente antes era simplemente comer a la hora que estuviese lista la comida, o en su defecto, encender la estufa por un tiempo prolongado, para poder calentar un poco la comida, estando siempre al pendiente de la misma, ya que si se dejaba desatendida por mucho tiempo podría quemarse.

Según muchos expertos, este instrumento ha significado un elemento de libertad para la mujer, ya que antes estaban sometidas a los horarios de trabajo de sus esposos, esto en cierta forma permitió que retoman control de su tiempo, otorgándoles una mayor presencia en las actividades de la sociedad.

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Cómo cambiar un fusible de microondas

Que el microondas deje de funcionar puede deberse a ciertos detalles que es necesario verificar antes de determinar qué se trata de un fusible. El primero es que encienda aunque no genere calor, y el segundo es que la electricidad que le está llegando al equipo es la necesaria para funcionar correctamente, ya que se han dado casos en los que la falla es en la electricidad recibida.

De funcionar correctamente y tener la corriente necesaria, el problema puede reducirse a los fusibles, los cuales pueden dañarse con el tiempo, sin importar la marca de los aparatos, aunque generalmente, mientras sean de gran calidad, los fusibles pueden durar mucho tiempo.

  • Abrir el microondas

Sin importar la marca o modelo del microondas, es necesario retirar la coraza protectora para poder observar los fusibles que este utiliza. Para poder hacer esto, se ha de desconectar el microondas, colocar una toalla vieja sobre una mesa, y colocar el artefacto sobre dicha toalla.

Lo primero a hacer es limpiar el microondas por la parte externa, ya que lo más probable es que tenga polvo. Luego se procede a retirar el cajón exterior, el cual suele estar asegurado con un par de tornillos y algunos ganchos, nada complicado de retirar ya que solo hace falta levantar la carcasa una vez que esta suelta y sale sin esfuerzo.

  • Verificar el fusible

Ya con vista al interior se debe ubicar el cajón de fusibles el cual suele estar en una esquina en la parte inferior, o en el centro del equipo. Dentro del mismo se encuentra un fusible que suele ser transparente, con aspecto de bombillo de tubo pero en cristal sólido. 

Para poder hacer la verificación es necesario observar el fusible, ya que si este se encuentra de color oscuro, significa que esta quemado y necesita reemplazo. Sin embargo, si está completamente claro, pero al verificar su resistencia con un voltímetro, este arroja un resultado de 0 ohms, quiere decir que no sirve más y necesita ser cambiado.

Para retirar el fusible solo se necesita tirar firme pero cuidadosamente del mismo, para poder llevarlo a la tienda y solicitar un repuesto.

  • Instancian de nuevo fusible

Colocar el nuevo fusible es aún más fácil que retirarlo, ya que debe ser colocado en la misma posición en la cual estaba originalmente, y asegurarlo tal y como estaba asegurado antes. Una vez que esté en su sitio se toma la carcasa, se arma el microondas nuevamente, y se procede a conectarlo para verificar que funciona.

Generalmente la prueba se hace en el mismo enchufe donde estaba trabajando para verificar nuevamente la disponibilidad de corriente. Dicha prueba no necesita ser muy larga. Una taza de agua por 10 segundos debe calentarse un poco, si esta queda fría, se prueba el microondas en otro enchufe, y si el agua sigue sin agarrar temperatura, entonces el microondas tiene otro problema.

Si se presenta otro inconveniente lo mejor es llevárselo a un técnico para que lo pueda revisar apropiadamente, y determine los arreglos necesarios.