La originalidad de una alfombra de piedras
Se trata de una idea muy decorativa que puedes utilizar para darle un aspecto natural o rústico a los recintos exteriores (como la terraza, por ejemplo) o a los baños, es el caso que se plantea en esta propuesta. Estas originales alfombras se pueden utilizar también como tapetes en la entrada de la casa, pero las piedras con las que se arme deben ser muy planas o redondas para evitar tropezones. Si quieres usar piedras para adornar, esta alternativa es una muy buena. Puedes elegir tu color favorito (hay muchos colores) y hasta puedes hacer combinaciones usando diferentes tonalidades para armar una composición agradable. Al combinar diferentes tonos, puedes generar hermosos patrones en el centro o en otras áreas de la alfombra como si se tratara de un mosaico antiguo.
Esta moqueta de piedras es puro arte. Si lo que buscamos es una ornamentación natural en baños o terrazas, esta alfombra es fácil de elaborar en casi todas partes y, muy importante, resulta de bajo coste. Estas alfombras se pueden encontrar en tiendas especializadas, y pueden aportar otras ideas para ampliar el proyecto que se tenga en mente. Lo más interesante de esta clase de alfombra es el significado y poder que se le da, haciéndola parte de la historia de la decoración de las casas. Tomar un merecido tiempo para descansar cerca de la playa o del lago puede ser el pretexto ideal para colectar las piedras que se necesiten para fabricar la alfombra que le dará un marcado carácter simbólico al rincón en donde la coloquemos.
¿Dónde encontrar las piedras adecuadas?
Estas piedras pueden encontrarse en infinidad de establecimientos para decoración porque cada vez se utilizan más como núcleos o como bases para macetas.
No obstante, si habitas en las cercanías de alguna playa o río, puedes correr con la suerte de encontrar algo que pueda servirte con solo dirigirte al lugar indicado. Lógicamente, debes escoger piedras cuyos bordes y superficie sean suaves para que no te lastimes al pisarlas. La alfombra que elabores debe estar hecha de un color que se integre completamente con los demás elementos del lugar. Más aún, también se le puede dar otras formas, como rectángulos o círculos.
Cantos rodados
Las piedras redondas que se pueden ver en los ríos u océanos se denominan cantos rodados; esta clase de piedras de formas uniformes se producen debido al rozamiento constante que sufren en el lecho del río o del mar y debido al rozamiento constante del flujo de agua.
Los guijarros están bien decorados y los guijarros sugieren el jardín, el aire libre y el ocio. Es ideal para decorar macetas, crear personajes e incluso hermosos fondos de lagos. Pero, además, estos cantos rodados también insinúan estilo y creatividad, que es simple cuando la naturaleza se combina con su estado y diseño más primitivo.
¿Qué material necesitas para elaborar esta alfombra?
Una alfombra vieja, unas cuantas piedras, pegamento y barniz.
Lo que debes hacer
Para esta actividad de manualidades utilizaremos piedras planas, preferiblemente piedras de playas o lagos, ya que éstas se han redondeado por la acción del agua. Recolectaremos y limpiaremos varias de ellas, siempre que tengan un aspecto bastante realista. Al colocarle piedras, esta alfombra tiene la ventaja de tener una superficie irregular.
Usaremos alfombras viejas que hayan sido teñidas o descartadas; si no, podemos comprar alfombras básicas y decorarlas con piedras. La base ha de tener consistencia gruesa porque debe soportar todas las piedras que se distribuyan y se fijen sobre ella.
Colocaremos las piedras detrás del patrón elegido para crear formas distintas. Siempre que los diseños de las bases que preparemos sean similares, podemos elaborar las alfombras colocando piedras de tamaño o figura que nos agrade más.
Pasaremos entonces a colocar las piedras y luego llenaremos cuidadosamente cada agujero que quede. Cuando coloquemos las piedras, debemos observar su distribución sobre la base. Es fundamental que no queden huecos, y cuanto más llena esté la alfombra, mejor.
Usamos pegamento para pegar cada piedra elegida; el pegamento que se utilice para fijarlas a la base debe ser fuerte para que pueda soportar cuanto pesen las piedras. La diversidad de colores y formas es un papel con el que debemos ir jugando vez tras vez. Dibujaremos líneas según el patrón que veamos al contemplar las partes ya completadas de la alfombra.
Cuando estén colocadas las piedras en su totalidad, acomodaremos el producto obtenido cubriendo las piedras con una capa de barniz. De esta forma, cada piedra quedará en su lugar correspondiente y habremos elaborado una alfombra muy original.
En cualquier espacio, esta alfombra hará muy bien su papel. Apoyar los pies descalzos sobre esta esterilla beneficiará nuestra salud, pues las piedras actúan como un masajeador natural.
