Como cuidar un erizo de tierra como mascota
El erizo es un mamífero que mide aproximadamente 15 centímetros y pesa hasta 400 gramos. Este pequeño mamífero, cada vez más popular como mascota, goza de una esperanza de vida de ocho años; pese a su aspecto simpático, es un ejemplar territorial que se defenderá –con sus púas– si se siente amenazado, de ahí que sea fundamental acostumbrarlo a la presencia humana desde que es una cría. Suena como todo un reto tener uno de estos simpáticos animales de mascota, te animas a tener uno? Aquí te traigo los mejores concejos para su cuidado, sigue leyendo.
Aprende del erizo de tierra
Es un ser encantador que muchos han escogido como mascota en los últimos años. Entre las curiosidades del erizo, sus púas son sin duda lo más característico y, a la vez, lo que más miedo hace sentir a los humanos. Sin embargo, este se evapora cuando vemos su dulce mirada y la ternura que desprende. Conozcamos más sobre él.
Para poder adoptar un erizo como mascota, es necesario que sepas todo lo que puedas sobre ellos, ya que cabe resaltar que no todos los erizos son aptos para ser domesticados. Los más comunes son el pigmeo o el egipcio, pero hay muchas especies más que podrían adoptarse como tal. Estas son algunas:
- Erizo común. Este ejemplar proviene de Europa y es el que más se ve en este continente como animal de compañía.
- Erizo de los Balcanes. Se diferencia del erizo común en su color, que es de una tonalidad más oscura de la gama de los marrones, y su pecho es totalmente blanco.
- Erizo de Manchuria. Es el más grande de los erizos, y a día de hoy habita en Rusia, Corea y China.
- Erizo de vientre blanco. Vive en África y su cuerpo es totalmente blanco a diferencia de su cabeza, de una tonalidad más oscura.
Estas son solo algunas especies, aunque hay muchas más que se pueden adoptar. Si has decidido poner un erizo en tu vida, asegúrate de que el que vas a adoptar está permitido por la ley del país en el que vives.
Alimentación del erizo de tierra.
Una de las preguntas más comunes sobre el erizo es sobre su alimentación.
Los erizos de tierra son omnívoros, (pueden comer de todo). En su estado salvaje se alimentan de pequeños insectos, gusanos, frutas, verduras, bayas, etc. En cautiverio o ya domesticados lo ideal es darle una dieta muy alta en proteínas y baja en grasas, ya que estos animalitos tienen tendencia a engordar.
Habitad adecuado
Su hábitat natural, y por ende su lugar de origen, se sitúa en Europa, Asia y África, aunque debido a su auge como mascota, se están expandiendo a otros continentes y lugares del mundo, lo cual permite que puedan encontrarse erizos en casi cualquier lugar del mundo.
Todo esto ha hecho posible que la propagación de la especie siga en aumento, y que se pueda suplir la demanda de este animal como mascota. Aunque todo tiene dos caras, algo en lo que no vamos a entrar por ahora.
Los erizos de tierra necesitan un espacio mínimo de aproximadamente 40 por 70 centímetros a 50 por 75 centímetros cuadrados. La casa o jaula debe tener un piso plano, no rejas o alambre, y una ventilación adecuada.
Temperatura adecuada
Al elegir una casa o jaula, la calefacción es un punto importante a considerar. Las casas de paredes sólidas y continuas, como las hechas con contenedores de plástico, retienen mejor el calor que las jaulas de alambre
Recuerda que el espacio mencionado anteriormente es lo mínimo, pero si es posible brindar un espacio más grande, mucho mejor. Sin embargo, en general las jaulas más grandes necesitan de mayor esfuerzo para mantener la temperatura correcta. Asumiendo que la temperatura ambiental de donde se encuentre la casa o jaula de nuestro erizo este por debajo de los 25°C tendrás que proporcionarle calefacción, de lo contrario, si la temperatura ambiente de forma natural se encuentra dentro de un rango adecuado (25-28°C) no necesitarás preocuparte por la calefacción y mientras más grande la casa o jaula que le proporciones a tu erizo de tierra mucho mejor.
Comportamiento del erizo
Aunque no lo parezca, el erizo es un animal territorial, como el perro o el gato. Si su territorio se ve amenazado usará su mayor arma de defensa: sus púas.
Además, es solitario, un aspecto en el que pensar antes de adoptar uno como mascota, pues no es un animal al que le guste formar parte de una familia, especialmente si se adopta de adulto. Es por ello que se sugiere que las adopciones de estos se hagan cuando son bebés, para así habituarlos a una vida más social y familiar.
Enrollarse es sin lugar a dudas el gesto de su comportamiento que más lo caracteriza. Se hace una pequeña bola gracias a la flexibilidad de sus músculos panicular y orbicular. Es una de sus maneras para defenderse, por lo que no te sorprendas si lo hace cuando vas a cogerlo. Hasta que no confíe en ti, no se abrirá, en todos los sentidos.
