Algunas ideas para elaborar adornos para toallas.
Algunos dicen que las toallas son todas iguales, que sólo varían en cuanto a color y, si acaso, al tipo de bordado, pero de resto no son gran cosa, aunque puedan tener dibujos estampados u otros elementos decorativos.
Pero ¿no es así precisamente como debe ser una toalla? Sí y no.
Primero, veamos lo que es una toalla:
Es una pieza de tejido con propiedades absorbentes (felpa), destinada a retirar el agua excedente de la parte externa del cuerpo humano tras el aseo personal y a retirar la humedad en general, esto a través del contacto directo. Para secar otros objetos, se utilizan trapos de tela común o paños.
Hay varios tipos de toallas, cada una con un propósito determinado: De pies, de baño (toallón para secar el cuerpo luego del baño, generalmente rectangular, mide 75×150 cm; algunas llegan a usarse como esteras de baño), de playa (algo más grande que la toalla de baño, ofrece superficie para tumbarse en la arena y para limpiar ésta del cuerpo; son muy coloridas), de manos (más pequeña que la toalla de baño, mide 30×60 cm y generalmente se cuelgan de toalleros cerca del lavabo), de papel (en este caso, no están hechas de felpa, sino de papel absorbente utilizable sólo una vez), compactada (toalla que ha sido comprimida a alta presión con lo cual su volumen se reduce a un cilindro de 2×1 cm, recuperando su forma original de 32×25 cm –extendida- al humedecerse, conservando todas sus propiedades, con una textura muy semejante a la del algodón, es totalmente biodegradable y 100% reciclable, elaborada en rayón no tóxico y esterilizado) o “turca” (en algunos lugares se le conoce con el nombre de “futa” o “mantaraya”, de textura exquisita y suave).
En vista de lo anterior, ya estamos claros de que existen toallas y también “toallas”: las que conocemos de común y que utilizamos en nuestro hogar… y las que no conocemos tanto, como la compactada y la “turca”. De las toallas antes descritas, las toallas de playa son las que más elementos decorativos pueden tener, precisamente porque se exhiben en la playa. Pero eso no significa que los otros modelos de toalla no sean susceptibles de ser decoradas.
Resumen
Toggle¿Cómo puede decorarse una toalla?
Decorar toallas no es una tarea difícil; sólo hay que pensar en su factibilidad y en su conveniencia, esto es: cuidar de que los adornos que se les añadan no sean demasiado grandes o imprácticos como para impedir su respectivo uso, escoger con criterio los adornos más adecuados de acuerdo al tamaño de la toalla, entre otras consideraciones.
Algunas ideas para adornar toallas
Si la toalla que deseas adornar es de las grandes, puedes elaborar un ornamento con algunos pedazos de tela vieja que conserves en tu casa. Basta con que recortes la tela, por ejemplo, dándole forma de letras, bien sea para formar palabras o tan sólo para colocar un par de letras indicativas de algo muy personal y luego las fijes a la toalla con aguja e hilo, a mano o con máquina de coser.
Si se trata de una toalla mediana, puedes tomar un pedazo de tul y coserlo a ella; si es de un color distinto al que tiene la toalla, el pedazo de tul le dará frescura y originalidad. Coloca el trozo de tul en el centro de la toalla o bien en cualquiera de sus bordes, pegándolo con silicona caliente o fijándola con aguja e hilo, sea a mano o mediante la máquina de coser.
Si es una toalla de mano, aún con su tamaño pueden ser adornadas, con sólo tomar una toalla grande o mediana y un sujetador para cortinas. Toma la toalla grande y dóblala por el medio, luego pásala por tubo destinado a las toallas y en el extremo de la toalla pon el sujetador de cocina. La toalla debe colgar de tal forma que puedas poner, enrollada dentro, una toalla de mano; este es un modo decorativo y realmente original de utilizar las toallas de uso diario. Para esa misma toalla de mano puedes poner un pedazo de tela que sea brillante con una cuenta en el centro, fijada con silicona; pon el pedazo de tela precisamente en centro de la toalla, de manera que, al ser colgada, quede arriba y la utilices para secarte las manos sin ningún inconveniente.
Finalmente, si te gusta tejer con ganchillo, tienes la opción de elaborar para las toallas unas puntillas. Tejes primero la puntilla usando un hilo bastante fino, que tenga el mismo largo que el borde de la toalla; cuando hayas terminado de elaborar la puntilla, lo que te resta por hacer es fijarla con aguja e hilo, bien sea a mano o con la ayuda de la máquina de coser.